jueves, 24 de marzo de 2011

MENSAJE POR EL DÍA MUNDIAL DEL TEATRO DEL MOTIN (MOVIMIENTO DE TEATRO INDEPENDIENTE)

DÍA MUNDIAL DEL TEATRO
MENSAJE DEL (MOTIN) MOVIMIENTO DE TEATRO INDEPENDIENTE




















Todo lo que afecta, estimula, deprime, ilusiona, despierta esperanzas, todo lo que germina, se desarrolla, fenece y se transforma en el ser humano, todo le concierne al Teatro.

El Teatro ha llegado, entonces, a este 27 de marzo del 2011, avanzando paralela y entrecruzadamente con el desenvolvimiento del Hombre a través de la historia, en cuyo albor jugó un rol preponderante. Aun antes de aparecer la agricultura, se organizó a través del movimiento, del gesto comunicador.  Allá en las cavernas y frente al fuego convocador, está el actor describiendo con desplazamientos y ademanes precisos su aventura frente a la fiera, que presenta como trofeo. Y está el primitivo autor y actor intentando emitir sonidos pioneros de La Palabra, máxima creación de la humanidad.

Cuando esta humanidad inicia su diálogo con la tierra -Pachamama, para nuestros antepasados- y nace la agricultura, el teatro se incorpora a plenitud a esta labor. Desde la siembra y las fatigas en la germinación de la semilla, hasta el júbilo de la cosecha, que estalla en danzas, canciones y ditirambos, reconocidos como el nacimiento formal del teatro occidental.

De los quehaceres en los cambios sociales  del mundo van alimentándose  las historias que nutren las representaciones. De la observación y la participación en esos acontecimientos se desarrolla la imaginación que permite al teatrista recrearlos para el espectador. Y es el público espectador quien, reconociendo en el teatro sus propias vivencias, las acogerá emocionalmente para  instalarlas en la conciencia.

Inmensa y abrumadora responsabilidad nos han legado los que nos antecedieron en este oficio, mucho más compleja en un mundo globalizante que propugna el consumismo y la individualidad, y que los medios de comunicación halagan y replican. Si el Entretenimiento es la tarea inherente del teatro, la pugna por mantener ese espacio semeja a la lucha de David contra Goliat. Pero quizá en ello mismo resida su fuerza. El Teatro se basa en la fuerza solidaria del grupo humano, ámbito que la tecnología no podrá superar.

En este nuestro espacio de la Pachamama que llamamos Perú, el Teatro popular, el teatro trashumante, con un entusiasmo y convicción a toda prueba, en “hormigueante actividad” -como diría Vallejo-, nos convoca  hoy al júbilo y a la reflexión. A esta cita han llegado reconocidos y queridos profesionales del Teatro. Una vinculación más frecuente de todas las vertientes teatrales fortalecería la brega por exigir, del Estado y sus gobernantes, la responsabilidad que les compete en el desarrollo del Teatro,  y por alcanzar Justicia, que la Paz llegará por añadidura.

DELFINA PAREDES

miércoles, 23 de marzo de 2011

INVITACIÓN

Mensaje peruano en el Día Mundial del Teatro

El mundo vive una avalancha de falsa riqueza.
La globalización y el consumismo nos han inducido a creer que poseer algún objeto lleno de leds es ser alguien en la vida, y a considerar más interesante a quien carga varios celulares que a quien lleva varios libros.
Con la muerte de los grandes ideales llegó el endiosamiento de las pequeñeces, de lo sobrevalorado, lo descartable, lo vacío. Y con eso llegó el desprecio a las ideas que exigen grandeza moral, llegó el permiso para hacer lo que convenga y no lo correcto, llegó la glorificación de lo bien hecho antes que del bien en sí mismo, llegó el sacrificio de aquello que nos hace pensar, en aras de la frivolización que solamente nos hace sentir. Ante este panorama, el teatro tuvo que asomarse al abismo y preguntarse si debe insistir en dar algo más que diversión, si debe arriesgarse a seguir pensando y proponiendo, si debe dejarse vencer por este mundo de oropel o enfrentarse a él, obligándolo a buscar lo superior, lo integrador, lo mejor de lo humano.
El mundo de hoy nos exige a los creadores teatrales preguntarnos, antes de crear, si queremos solamente dinero y sonrisas o si aspiramos a cuestionar, a construir o a al menos, a preguntar con profundidad. En nuestro país, bañado hoy por la falsa felicidad del consumo –tan parecido a la Europa de entreguerras y por tanto, tan poco auspicioso- es peligroso ser un artista que piensa, ya no porque uno pueda terminar preso o desaparecido sino porque puede acabar perdiendo la fama y la riqueza que el éxito implica. Porque el éxito, hoy, se mide por los dólares que se reciben y no por las propuestas que se dan. Pese a ello, las mujeres y hombres del teatro peruano se arriesgan todos los días. Arriesgan su comodidad y su dinero –en el único estado de América que no apoya masivamente al arte ni a la tecnología- poniendo en escena obras que dicen lo que ellos realmente quieren decir. Arriesgan su prestigio al buscar, aún en los escenarios más lujosos, hablar de justicia y de exclusión para mover el alma del país. Y arriesgan el amor de sus familias al dedicarse a esto y al pelear para que la figuración venga acompañada por un mínimo de pensamiento crítico que nos mantenga lejos de la sección Espectáculos y nos dé méritos para seguir en la sección cultural.
El Perú necesita que sigamos peleando juntos por la revaloración de las ideas, de la belleza y de la crítica social. El Perú necesita que insistamos en ser mejores y sobre todo que insistamos en hacer mejores a quienes nos siguen. Que divirtamos mientras cuestionamos, que retratemos lo nuestro con inteligencia y que volvamos a darle valor al pensamiento, confiados en que las ideas que el país usará para crecer nacerán de gente como nosotros, creadores tercos e insatisfechos que contamos, por fortuna, con el apoyo de nuestro público, que viene a darnos lo poco que tiene esperando que le devolvamos mucho más. Porque sabe que somos capaces de dar muchísimo. En nuestro Perú tan querido, donde todos somos pobres culturalmente, nos toca a los artistas exigirnos más ideas para que nuestro público se enriquezca, entendiendo por riqueza no las cosas que se meten al bolsillo sino las que nacen de la mente y se enraízan en el corazón.

CESAR DE MARÍA

Mensaje del Día Mundial del Teatro 2011

La reunión de hoy es un reflejo fiel del inmenso potencial que tiene el teatro para movilizar comunidades y sortear las diferencias.
¿Han imaginado alguna vez que el teatro podría ser una potente herramienta para la paz y la reconciliación? Mientras las naciones consumen sumas colosales de dinero en misiones para la paz en áreas del mundo en violento conflicto, se le presta poca atención al teatro como alternativa individualizada para la transformación y el manejo de conflictos. ¿Cómo pueden los ciudadanos de la madre Tierra lograr paz universal cuando los instrumentos que se emplean para ello vienen de poderes externos y aparentemente represores?
El teatro permea sutilmente el alma humana atenazada por el miedo y la sospecha, alterando la imagen que tienen de ellos mismos y abriendo un mundo de alternativas para el individuo y por consiguiente para la comunidad. Puede dar significado a realidades diarias mientras previene un futuro incierto. Puede tomar parte de la política en formas simples, directas. Al ser inclusivo, el teatro puede presentar experiencias capaces de trascender preconceptos erróneos.
Además, el teatro es un medio probado para abogar e introducir ideas que sostenemos colectivamente, y por las que deseamos luchar cuando son violadas.
Anticipando un futuro pacífico, debemos comenzar por usar medios pacíficos que busquen entender, respetar y reconocer las contribuciones de cada ser humano en el proceso de conducir a la paz. El teatro es ese lenguaje universal por el que podemos enviar mensajes de paz y reconciliación.
Involucrando activamente a los participantes, el teatro puede hacer que muchas almas deconstruyan preconceptos y, de esta manera, da al individuo la oportunidad de renacer para hacer elecciones basadas en conocimientos y realidades redescubiertas. Para que el teatro prospere entre otras formas del arte, debemos dar un enérgico paso adelante para incorporarlo a la vida cotidiana, tratando temas apremiantes de conflicto y paz.
Buscando la transformación social y la reforma de comunidades, el teatro ya existe en áreas devastadas por la guerra y entre pueblos que sufren pobreza o enfermedad crónica. Hay un número creciente de historias de éxito donde el teatro ha logrado movilizar audiencias para construir conciencia y ayudar a víctimas de traumas de post-guerra. Plataformas culturales como el Instituto Internacional del Teatro, que apunta a "consolidar la paz y la amistad entre las gentes" ya tienen existencia.
Es entonces una farsa mantenerse en silencio en tiempos como los nuestros, conociendo el poder del teatro, y dejar que portadores de armas y disparadores de bombas sean los guardianes de la paz de nuestro mundo. ¿Cómo pueden herramientas de alienación ser también instrumentos de paz y reconciliación?
Los conmino en este Día Mundial del Teatro a pensar en esta perspectiva y a adelantar el teatro como una herramienta universal para el diálogo, la transformación social y la reforma. Mientras las Naciones Unidas gasta sumas colosales en misiones de paz en todo el mundo con el uso de armas, el teatro es una alternativa espontánea, humana, menos costosa y mucho más poderosa.
Puede que no sea la única respuesta para traer paz, pero el teatro debe seguramente ser incorporado como una herramienta efectiva en misiones de paz.
- Jessica A. Kaahwa -
Traducción: Diana Melamet

ITI-UNESCO PERÚ ALISTA CELEBRACIÓN POR EL DÍA MUNDIAL DEL TEATRO

En la fecha central, que se llevará a cabo de forma gratuita en el Centro Cultural de la Católica, habrá un sentido homenaje al Teatro de la Universidad Católica (TUC).












El Día Mundial del Teatro, organizado por el ITI-UNESCO PERÚ, a celebrarse este martes 29 de marzo a las 7:00 p.m. en el Centro Cultural de la Católica, en Av. Camino Real 1075 San Isidro, contará con diversas actividades en torno a esta disciplina, entre las que figuran las lecturas de los Mensajes Conmemorativos por esta fecha de la desatacada actriz, directora y dramaturga ugandesa JESSICA KAAHWA, y de nuestro reconocido dramaturgo CÉSAR DE MARÍA, así como un homenaje al TEATRO DE LA UNIVERSIDAD CATÓLICA (TUC) por su larga e impecable trayectoria.

El Día Mundial del Teatro, creado en 1961 por el INSTITUTO INTERNACIONAL DEL TEATRO (ITI), es motivo de celebración anual por todos los Centros Nacionales del ITI y la comunidad teatral internacional. En todo el mundo se realizan actividades y manifestaciones artísticas, relacionadas con las Artes Escénicas. La página web del ITI UNESCO informa sobre dichos eventos: http://www.iti-worldwide.org/
Es por ello que el CENTRO PERUANO DEL INSTITUTO INTERNACIONAL DE TEATRO ITI-UNESCO le rendirá un justo homenaje, por su impecable trayectoria artística, al TUC, uno de los más importantes semilleros de actores de teatro, cine y televisión del país, que cumple 50 años. El Teatro de la Universidad Católica (TUC) cuenta con una escuela de formación profesional llamada Escuela de Teatro del TUC que, al depender de la Pontificia Universidad Católica del Perú, se nutre de una formación humanista y de un entrenamiento intensivo que exigen un alto nivel de rendimiento; así como una auténtica y vigorosa vocación artística.

























El Mensaje Internacional por este día ha sido redactado por Jessica Kaahwa, actriz, directora y dramaturga ugandesa, (ha escrito más de 15 obras de teatro, televisión y radio), muy respetada internacionalmente por su labor humanitaria. Posee una carrera larga carrera en el diseño de una metodología participativa de la comunicación para el desarrollo. Titulada por la universidad de Benin, la Dr. Kaahwa estudió historia del teatro, teorías y críticas en la Universidad de Maryland, USA. Ha sido la arquitecta de un sinnúmero de iniciativas nacionales que han intentado utilizar el teatro y los medios como fuerza constructiva en ajustes del conflicto y para la mejora de la salud. Un buen ejemplo es su experimentación reciente con el “teatro para el significado personal” y el “teatro de los conflictos de comunicación.” Trabaja actualmente en la integración de la “teoría de proceso” en práctica del teatro terapéutico.




















Por su parte, el Mensaje Nacional por esta fecha será escrito por CÉSAR DE MARÍA, uno de los dramaturgos peruanos más destacados de la actualidad y dedicado desde hace veinte años en paralelo al teatro y a la publicidad. La actual Junta Directiva del ITI-UNESCO Perú está conformada por Ricardo Morante (Presidente) y Sergio Velarde, y es la encargada de la realización de la presente ceremonia. La cita es este martes 29 de marzo a las 7:00 p.m. (hora exacta) en el Centro Cultural de la Católica, en Av. Camino Real 1075 San Isidro. La entrada es libre.

Se ruega su difusión.

ITI-UNESCO PERÚ